Cada vez está más claro que las nuevas generaciones no llegarán a tener jubilación en nuestro país. Probablemente la última generación española que logre tenerla, será la de los hijos del baby boom. Y no es de extrañar si pensamos que nuestra sociedad tiene una esperanza mayor que antaño, que la crisis ha impedido a la mayoría de los españoles acceder a un puesto de trabajo estable, y que, por supuesto, como consecuencia, el número de cotizaciones ha ido disminuyendo..
Y, ante estas expectativas, ¿qué podemos hacer los españoles para planificar nuestra jubilación y asegurarnos una vejez digna? Cada vez es más común dentro de los países europeos buscar una alternativa privada para poder asegurarse una pensión adecuada junto con la aportación pública. Por desgracia, a la mayoría de los españoles nos resulta muy complicado ahorrar para nuestra vejez teniendo en cuenta la caída tan estrepitosa de los sueldos que llevamos viviendo desde hace años. No hay que olvidar que en la actualidad el salario real que cobran la mayor parte de los españoles no supera a los 15.000 € y que, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, el salario medio no llega a los 23.000 €. Ante estas expectativas tan poco halagüeñas está claro que nadie puede librarse de contratar un plan de pensiones alternativo, pero, también está claro, que la planificación de nuestra futura pensión no puede ser la misma si tenemos un sueldo mileurista que si nuestras mensualidades son verdaderamente altas y no nos cuesta nada apartar una cantidad de dinero elevada mensualmente de cara a nuestra futura jubilación. Por este motivo, desde inversionesseguras.es, queremos ofrecerte algunos de los principales trucos, facilitados por los expertos, para poder solventar con dignidad el tema de tu futura pensión dependiendo del tipo de renta que tengas (baja, media o alta). ¡Comencemos!
¿Cómo planificar la jubilación si tengo una renta baja?
Una recomendación que cualquier experto va a hacerte en esta situación, es comenzar a planificar tu jubilación lo antes posible. Si eres un trabajador joven en activo que acaba de comenzar su andadura profesional, hay varias opciones por las que te puedes decantar:
- Seguros de ahorro. Una de tus mejores bazas es poder contar con productos de ahorro de gran flexibilidad respecto a las cantidades que vayas ingresando. Debes buscar planes que permitan aportaciones muy bajas, incluso de 50 € mensuales, y que no te penalicen en caso de aumentar o disminuir la aportación, además de ofrecerte algo de rentabilidad. En este sentido el mejor movimiento es contar con un seguro de ahorro que hacen las funciones de hucha, según explica Unespa, patronal de las aseguradoras, y además protege tu dinero, por lo que se considera una alternativa perfecta para las rentas media-bajas. Este tipo de seguros ofrecen ciertas ventajas, como las mejoras en la tributación, puesto que no pagas impuestos por ellos hasta que comiences a utilizar el importe, una rentabilidad medianamente adecuada y, además, ofrecen cobertura en caso de fallecimiento, opción que los depósitos no incluyen. Compañías como la Mutua Madrileña ofrecen seguros de ahorro.
- Ahorro 5. Se trata de seguros que te permiten ahorrar a corto medio plazo y tienen un límite de 5000 €. Una de las ventajas y particularidades de este tipo de seguros es que están libres de impuestos. Esta modalidad te permite comenzar con aportaciones de entre 100-200 € al mes e ir aumentándolas un 2 % cada año.